¿Cómo hacer tu piscina segura para perros?
Cuando se tiene una piscina, esta es la gran aliada de los días calurosos y de los momentos compartidos en familia o con amigos. No obstante, una de las preocupaciones que suele aparecer tiene que ver con la seguridad, especialmente en las casas con mascotas. Por eso, a continuación, vamos a contarte cómo hacer que tu piscina sea segura para perros y evitar así los accidentes.
Importancia de los dispositivos de seguridad en las piscinas en casas con perros
De acuerdo a distintos estudios que se han realizado, colocar dispositivos de seguridad ayuda a prevenir más del 50% de los accidentes que pueden darse en piscinas, especialmente en los grupos más vulnerables a estos, como son los niños y las mascotas. En este sentido, una de las principales claves para evitar que esto pueda suceder es prevenir las caídas de los niños o de los perros a las piscinas.
Una de las mejores formas de lograr esto es colocando vallas de seguridad especiales para piscinas, que son las que evitarán que los niños o los perros puedan acercarse a la piscina cuando esta no está siendo vigilada. En caso de optar por esta opción, es muy importante que las vallas tengan por lo menos 1,20 metros de altura y que mantengan una distancia reducida entre ellas, a fin de evitar que los perros o que los niños puedan pasar a través.
Las cubiertas de piscinas
Además de las vallas, una de las formas de garantizar la seguridad de tu piscina para que ni niños ni perros puedan ingresar a ella cuando nadie está viendo es mediante la colocación de cubiertas. Pero, además, las cubiertas están diseñadas para mantener las piscinas limpias y cálidas a lo largo de todo el año, protegiéndolas del invierno y reduciendo los trabajos de limpieza y mantenimiento que es necesario realizar a lo largo del año.
Estas cubiertas, como las cubiertas de piscinas de Poolaria.com, se colocan directamente sobre la piscina y, además de mantener la temperatura y el agua limpia, evitan que los perros puedan caer a la misma. Algo que es importante tener en cuenta para quienes prefieren esta opción es que las cubiertas que se elijan deben necesariamente cumplir con la normativa europea vigente, a la vez que deben permanecer ancladas al borde de las piscinas para que no se comben y no sean un nuevo riesgo.
El rol de la vigilancia
Ya hemos visto anteriormente las herramientas a las que se puede acudir para evitar que los perros o los niños puedan ingresar a las piscinas cuando nadie está viendo, representando esto un riesgo para su bienestar e integridad. No obstante, en los meses de verano o en los momentos de piscina, es importante mantener una correcta vigilancia durante el día cuando los niños o los perros se encuentren en las inmediaciones de esta. En caso de no poder realizar esta vigilancia, será necesario colocar alguno de los métodos anteriormente mencionados para evitar caídas y ahogamientos. Además, es muy importante que las personas adultas que se encuentren vigilando la zona sepan nadar adecuadamente en caso de que fuera necesario ayudar al perro o al niño a salir de allí.